DEL IDIOMA
Hiperplasia prostática "benigna"
Ángel Manuel Tundidor Bermúdez
Servicio de Urología. Hospital General Docente Guillermo Domínguez Puerto Padre. Las Tunas, Cuba.
La primera referencia recogida en la base de datos Medline sobre la enfermedad que hoy conocemos como "hiperplasia prostática", data de 1895.1 Por aquel entonces, dicha afección era conocida, en países anglófonos, por el nombre de "prostatic hypertrophy" ("hipertrofia prostática"); término basado, presumiblemente, en hallazgos macroanatómicos (no histológicos), y respaldado por los diccionarios de la lengua inglesa, que aún hoy señalan, como segunda acepción de "hypertrophy": "exaggerated growth or complexity"2 (crecimiento o complejidad exagerados).
No fue hasta 1946 que apareció un artículo en el que se agregaba el calificativo de "benign" ("benigna") a dicha "hypertrophy",3 lo que sugería la existencia de otra de tipo "no benigno" o "maligno". Esta suposición se vio explicitada por otro trabajo publicado cinco meses después, en el que se diferenciaban ambos procesos, entendiéndose como "maligna" el carcinoma de la glándula.4
Sin embargo, ya en 1940 comenzó a aparecer en la literatura científica el término "prostatic hyperplasia",5 basado en criterios histológicos estrictos. Todo parecía estar en orden, hasta que en 1948 vio la luz el nombre "benign prostatic hyperplasia",6 muy de moda aún en nuestros días, y refrendado también por los léxicos ingleses (que lo hacen sinónimo de "benign prostatic hypertrophy"),7 pero que en buena Histopatología y en buen Español constituye un pleonasmo, puesto que "hiperplasia" se define como "aumento de volumen de los órganos y tejidos producto del aumento en el número de células que lo constituyen",8 o lo que es lo mismo: "excesiva multiplicación de células normales en un órgano o en un tejido".9
Así como en Español no decimos "carcinoma prostático maligno", ¿por qué continuar aferrados a la "hiperplasia prostática benigna"?
REFERENCIAS BIBLIOGRÁFICAS
1. Swain J. Castration for prostatic hypertrophy. Br Med J. 1895 Jan 5;1(1775):12-3. PMID: 20755243 [PubMed]
2. Merriam-Webster Medical Dictionary. Disponible en: http://www.merriam-webster.com/ dictionary/ hypertrophy?show=0&t=1316872038 (Fecha de acceso: 24 de septiembre de 2011)
3. Heckel NJ. Sex hormone therapy in the treatment of carcinoma of the prostate and benign prostatic hypertrophy. Clinics. 1946 Dec;5(4):860-77. PMID: 20283908 [PubMed - OLDMEDLINE]
4. Zondek H. On the hormonal treatment of benign and malign prostatic hypertrophy. Harefuah. 1947 May 1;32(9):145-8. PMID: 20267138 [PubMed - OLDMEDLINE]
5. Huggins C, Clark PJ. Quantitative studies of prostatic secretion: II. The effect of castration and of estrogen injection on the normal and on the hyperplastic prostate glands of dogs. J Exp Med. 1940 Nov 30;72(6):747-62. PMID: 19871058 [PubMed]
6. Shivers CH, Groom CE. Prolonged morbidity following operation for benign prostatic hyperplasia; a statistical survey. J Urol. 1948 May;59(5):893-906. PMID: 18913853 [PubMed - OLDMEDLINE]
7. Merriam-Webster Medical Dictionary. Disponible en: http://www.merriam-webster.com/dictionary/benign+prostatic+hyperplasia?show=0&t= 1316877154 (Fecha de acceso: 24 de septiembre de 2011)
8. Cirión Martínez G, Herrera Pérez MA. Anatomía patológica. Temas para enfermería. La Habana: Editorial Ciencias Médicas, 2005:156.
9. Diccionario de la Real Academia Española. Disponible en:http://buscon.rae.es/draeI/SrvltConsulta?TIPO_BUS=3&LEMA=hiperplasia (Fecha de acceso: 24 de septiembre de 2011)
Recibido: 24-sep-11
Aprobado:12-oct-11
Correspondencia: Dr. Ángel Manuel Tundidor Bermúdez Hospital General Docente "Guillermo Domínguez" Puerto Padre. Las Tunas, Cuba. Correo: tundidor@cucalambe.ltu.sld.cu